Sociedad | Preservación del patrimonio local

Puesta en valor y restauración de los históricos buzones del correo




La restauración de los históricos buzones de correo, emplazados en diferentes puntos de la ciudad, es un proyecto llevado adelante por la Secretaría de Espacios Públicos local, que tiene por objetivo preservar y poner en valor estos bienes, símbolo de otra época y esenciales en el sistema de correspondencia oficial y único del “Correo Argentino” hasta los años '90.

En ese sentido, el Secretario de Espacio Públicos de la Municipalidad, José Etchart, comentó que los mismos “poseen un valor testimonial e identitario muy alto y son de suma importancia en la historia de nuestra ciudad, ya que son mobiliario urbano del Siglo XIX que sigue en pie”.

Asimismo, el funcionario afirmó que “los buzones que aún están en la ciudad serán declarados bienes integrantes del patrimonio cultural, ya que la finalidad de este tipo de acciones es la toma de conciencia del alto valor patrimonial tangible e intangible de los mismos”.

Sobre el trabajo de restauración y puesta en valor, se precisó que consistirá en la reparación estructural de aquellos buzones que lo requieran; la limpieza interior, desvandalización y luego serán pintados en su color original. 

Se trabajará con aquellos emplazados en calle 16 esquina 47; Avenida 51 esquina 21; calle 15 entre 56 y 57; Avenida 7 esquina 61; calle 6 esquina 50; Avenida 1 entre 43 y 44; Avenida 1 esquina 36, y calle 8 esquina 34.

Vale aclarar que las acciones se desarrollan en el marco de un nuevo aniversario de la ciudad, con el objetivo de preservar la historia platense.

Una historia de fines del Siglo XIX

Testigos de una época en la que la correspondencia venía sobre un papel y la mensajería más rápida se llamaba telegrama, muchos de estos buzones llegaron de Europa, la mayoría desde Inglaterra a fines del Siglo XIX y paulatinamente se empezaron a instalar en las esquinas de varias ciudades del país a partir de 1892.

En nuestra ciudad, pocos años luego de su fundación, se instalaron buzones rojos y cilíndricos en puntos clave del recorrido urbano, como en los que permanecen actualmente. Por allí pasaban las comunicaciones de aquella época, con estafetas postales y cartas que recorrían el mundo y la figura trascendente del cartero que las repartía en los hogares.

Actualmente los buzones pertenecen al Estado Nacional y son administrados por el Correo Argentino con previa declaración mediante ley provincial como patrimonio cultural de la Provincia de Buenos Aires.